¿En qué consiste la digitalización de la cadena de suministros?

El proceso de digitalización de la cadena de suministros –si se lleva hasta el máximo de sus posibilidades– debe buscar el objetivo de eliminar todas las tareas manuales que en ella se desarrollan. Esto se consigue aplicando tecnología avanzada de principio a fin, de modo que afecte a la cadena de extremo a extremo: desde la compra de las materias primas hasta la entrega del producto al cliente (que es la figura que siempre debe estar en el centro).

Y teniendo siempre en cuenta un aspecto vital para conseguir la satisfacción del mismo: la logística inversa, es decir, un buen sistema de devoluciones.

Todos y cada uno de los departamentos que, en mayor o menor medida, intervienen en la cadena de suministro, han de involucrarse en el camino de la digitalización. Para ello, cada empresa tiene que abrazar el concepto de Industria 4.0, que supone, entre otras cosas, la utilización continua de datos, sistemas digitales, inteligencia artificial, blockchain, realidad virtual y aumentada, Big Data o business intelligence.

El propósito final (que engloba infinitas pequeñas metas) es conseguir una trazabilidad-visibilidad completa. O lo que es lo mismo, que en todo momento y de manera relativamente sencilla y rápida, los responsables de la gestión del almacén sean capaces de conocer hasta el más mínimo detalle relativo a la cadena: ya sea el stock exacto, el lugar en el que se encuentran los camiones, las carretillas elevadoras, los pedidos pendientes o cualquier otra duda que surja.

Nuevas tecnologías para optimizar la digitalización de la cadena de suministros

• Internet de las Cosas (iOT): supone que todo esté conectado con todo. El Big Data y el Business Intelligence otorgan a las empresas infinitas posibilidades para la recopilación de datos. El análisis de estos facilitará notablemente, por ejemplo, la elaboración de una estrategia, la respuesta ante contratiempos o la predicción de escenarios futuros.
• Inteligencia Artificial (IA): como en el caso anterior, a partir de la IA se conseguirá tener una visión completa de las tareas que se llevan a cabo en la cadena de suministros y, por ende, ayudará a ser mucho más efectivos. Esto, a la postre, supondrá una reducción de los costos y una mayor satisfacción del cliente.
• Blockchain: la cadena de bloques se suma a las dos tecnologías antes listadas en el propósito final de favorecer la tarea de rastreo de principio a fin. Con ella es posible enviar información encriptada, que nadie tendrá la posibilidad de alterar.
• Realidad virtual y aumentada: apoyándose principalmente en la inteligencia artificial y la blockchain, la realidad virtual dota de una cantidad enorme de posibilidades a los operarios para ser más rápidos y efectivos en sus quehaceres en un almacén. La realidad aumentada los guía, los ayuda, los controla, y todo esto lo hace en tiempo real.
• Robotización y automatización de procesos: la automatización y robotización de procesos repetitivos repercutirá de manera directa en la mejora de la productividad y en la búsqueda de la calidad total.